En octubre de 2016, la Academia Sueca anunció la entrega del Premio Nobel de Literatura al cantautor Bob Dylan “por haber creado nuevas expresiones poéticas en el marco de la gran tradición musical americana”. La sorpresa fue mayúscula: por primera vez, un músico se hacía con el más prestigioso galardón de las letras. La polémica tampoco se hizo esperar, y no faltaron voces que cuestionasen la decisión, planteando sarcásticamente si los novelistas podrían entonces aspirar al Grammy.
Dicha controversia ha alimentado debates necesarios a propósito de los límites entre poesía y canción, si bien e