La canción en cuestión habla de manera sincera y dolorosa sobre los problemas de James Hetfield con el alcohol.
En sus inicios, cuando Metallica era una banda con un sonido más agresivo y oscuro, sus letras eran más propensas a hablar de las partes más oscuras de la psique humana, como el hombre encerrado en un manicomio en “Welcome Home” o el herido de guerra que se aferra a la vida en “One”. Sin embargo, hay una canción en la discografía del grupo que es capaz de afectar en gran medida al vocalista James Hetfield, pues habla de un problema con el que ha lidiado a lo l