La relación entre el cine y la música es tan antigua como la propia historia del séptimo arte.
La relación entre el cine y la música es tan antigua como la propia historia del séptimo arte. El idilio entre ambos se remonta a 1894, cuando el británico William K.L. Dickson, quien trabajaba para Thomas Edison, rodó la primera película sonora experimental de la historia.
Se trata de un cortometraje de apenas 20 segundos en el que el propio Dickson aparece tocando el violín delante de un fonógrafo. Esta primera película musical, de carácter no narrativo, se realizó para el kinetófono, en un intento